Minuto a minuto: radiografía de un ciberataque a una PYME

¿Alguna vez vez te has preguntado cómo se gesta un ciberataque a una empresa como la tuya desde la fase de planificación en las profundidades de la dark-web hasta sus consecuencias, pasando por todos los estados de alerta que experimentarán tus empleados y las medidas que puedes tomar para evitarlo? Axyom te trae este post en el que analizamos un ataque digital de forma accesible pero rigurosa. El conocimiento es poder.



00:00 - Objetivo en la mira


En un foro clandestino de la dark web, un grupo de ciberdelincuentes con base en una ciudad de nombre impronunciable de Europa del Este o Pakistán, recibe una lista de objetivos vulnerables. Entre ellos, una PYME española dedicada a la distribución nacional de productos tecnológicos. Se trata de una empresa familiar de unos 50 empleados que, aunque cuenta con sistemas actualizados y mecanismos de protección básicos, presenta puntos débiles evidentes.



01:15 - Preparación del ataque


Los atacantes ejecutan un escaneo automatizado de puertos en busca de accesos abiertos. Encuentran un servidor de Escritorio Remoto sin autenticación multifactor, lo que les permite el acceso sin dificultades. Además, a través de bases de datos filtradas en foros oscuros, obtienen credenciales de empleados que han sido comprometidas en brechas de seguridad anteriores.



02:30 - Acceso inicial


Utilizando una combinación de credenciales filtradas y explotación de esos puntos débiles, los ciberdelincuentes acceden sin levantar sospechas. Comienzan a analizar la red interna para identificar activos críticos. Lo que buscan es información sensible: datos de clientes y proveedores, estructura de pagos de la empresa e informaciones bancarias.



03:45 - Comprometiendo a toda la empresa


Tras obtener este acceso inicial, instalan un programa (malware) diseñado para seguir funcionando a pasar de ser detectado y se bloquee su acceso inicial. A través de herramientas que han adquirido en la dark-web, siguen comprometiendo las cuentas del resto de empleados y obteniendo más información sobre los movimientos financieros de la empresa.



9:30 - Primera señal de alerta


Un empleado del departamento de logística intenta ingresar al sistema de gestión de pedidos y nota que su contraseña ha sido cambiada. Supone que es un error interno y solicita ayuda al departamento de IT. Mientras tanto, los ciberdelincuentes ya han obtenido control sobre una buena parte de los servidores y están preparando el despliegue de más programas dañinos.



10:30 - Escalada del ataque


Los atacantes ejecutan su plan y despliegan un ransomware en los servidores principales, cifrando archivos clave de la empresa, incluyendo bases de datos de clientes, documentos financieros y registros de pedidos. Paralelamente, borran copias de seguridad accesibles dentro de la red para dificultar la recuperación. Dejan un mensaje de rescate exigiendo 50.000 euros en Bitcoin a cambio de la clave de descifrado, amenazando con publicar información confidencial en caso de no recibir el pago en 48 horas.



11:30 - Primeras reacciones en la PYME


El buzón de correo del responsable de la empresa echa chispas. Todos los empleados están reportando problemas a la hora de acceder a sus archivos. Además, algunos de ellos están preocupados por si los ciberatacantes han accedido también a sus datos personales, nóminas y correos privados. El pánico en la empresa es total.



11:50 - Confirmación del ataque


El departamento de IT revisa los servidores y confirma el mensaje de rescate. Las malas noticias no dejan de aumentar, ya que el poco confirman que los atacantes han tomado el control de muchos de los servidores. Deciden desconectar todo para evitar la propagación al resto de sistemas. La empresa y todas sus actividades quedan paralizadas.



13:00 - Llamada a expertos en ciberseguridad


Ante la gravedad de la situación, el propietario contacta a una empresa especializada en respuesta a incidentes. Los expertos recomiendan no pagar el rescate y, en su lugar, iniciar un protocolo de contención y recuperación. También comienzan a analizar la posibilidad de restaurar datos desde copias de seguridad externas. Si es que las hay.



16:00 - Daños colaterales


Se estima que por cada día de inactividad se pierden entre 8.000 y 10.000 euros en ingresos. Algunos clientes están pensando en cancelar pedidos y buscar otros proveedores. Además, existe la preocupación de que los ciberdelincuentes cumplan su amenaza de divulgar información sensible.



21:30 - Recuperación parcial


Gracias a la intervención de los expertos en ciberseguridad, se logra restaurar parte de los sistemas utilizando copias de seguridad externas. No es posible recuperar todo porque varias máquinas dedicadas a realizar estas copias también han sido infectadas. Lo más doloroso es que los pedidos y transacciones de las últimas 72 horas han sido completamente eliminados.



23:00 - Medidas de seguridad reforzadas


La empresa implementa una serie de medidas para evitar futuros ataques:

  • Activación de autenticación multifactor en todos los accesos remotos.
  • Políticas más estrictas de contraseñas y monitoreo de accesos sospechosos.
  • Contratación de un ciberseguro para cubrir posibles pérdidas futuras.



Día siguiente - Recuento de daños


Tras evaluar la situación, la empresa ha evitado pagar el rescate, pero ha sufrido pérdidas económicas significativas y daños reputacionales. Paralelamente, se inicia un plan de formación para empleados en ciberseguridad. Clientes y proveedores son informados del incidente y se toman medidas adicionales. Aun así, varios de éstos deciden finalizar su colaboración con la empresa. 



Conclusión: la importancia de la prevención


Este ciberataque ha demostrado cómo una vulnerabilidad puede ser explotada en cuestión de horas, generando un impacto devastador en una empresa. La falta de medidas de seguridad adecuadas puede traducirse en pérdidas financieras, daños reputacionales e incluso el cierre del negocio. Invertir en prevención, protección avanzada y un ciberseguro adecuado no solo ayuda a mitigar el impacto, sino que puede marcar la diferencia entre la recuperación y el colapso total de tu empresa.